Back-to-School MELTDOWN: EU & Australia HALT Parcels Over Trump’s Tariffs
Crisis en el comercio internacional: la EU y Australia suspenden envíos de paquetes a EE.UU. por las nuevas tarifas de Trump. El 29 de agosto, el corredor más rápido del tráfico global de paquetes pequeños se detuvo en seco. Los operadores postales en Europa y Australia han decidido suspender temporalmente o reducir drásticamente los envíos de bajo valor a Estados Unidos. La razón es clara: la exención de tarifas de importación ha sido eliminada permanentemente. Los envíos que antes no pasaban por la banda de aduanas de 0 dólares ahora enfrentan un duro régimen tarifario, con un costo fijo de 8,200 dólares por paquete durante un período de transición de seis meses.
Este cambio no solo afecta el flujo de envíos internacionales, sino que también impacta los precios y tiempos de entrega en el mercado interno de manera inmediata. Desde accesorios de moda hasta repuestos electrónicos, una vasta gama de productos se encuentra atrapada en esta nueva realidad. Los operadores postales europeos, liderados por Alemania, han anunciado la suspensión de operaciones, mientras que Australia Post también ha cerrado el flujo comercial, manteniendo solo envíos de cartas y regalos de bajo valor.
El nuevo régimen de tarifas impone un costo de cumplimiento que ha dejado a los operadores postales en una carrera contra reloj. Sin la infraestructura adecuada para manejar la recolección de impuestos y los nuevos requisitos de datos, los retrasos son inevitables. Con 1.36 mil millones de paquetes que ingresaron a EE.UU. bajo la banda de “dimminimus” en 2024, la situación amenaza con desestabilizar el mercado de consumo.
Los pequeños vendedores, especialmente aquellos que dependen de envíos directos, enfrentan una crisis inminente. Muchos se ven obligados a buscar soluciones temporales, como establecer microalmacenes en EE.UU. o interrumpir las ventas. La temporada de regreso a clases se presenta como la primera gran prueba de este colapso logístico, donde el tiempo de entrega se convierte en un factor crítico para padres y estudiantes.
Este cambio drástico en el comercio internacional no es solo una cuestión de tarifas; es un llamado urgente a la adaptación en un entorno que se transforma rápidamente. La era de envíos rápidos y económicos está dando paso a un periodo más costoso pero predecible. ¿Quién pagará el precio de esta transición: el vendedor o el comprador? La respuesta a esta pregunta podría definir el futuro del comercio global.