La leyenda del tenis español le cuenta a su compatriota ex tenista profesional Andy Roddick que su papel en la Ceremonia de Apertura de los Juegos Olímpicos de París 2024 sólo le fue comunicado justo antes de recibir la antorcha de manos de Zinedine Zidane.
Las ceremonias de inauguración de los Juegos Olímpicos suelen planificarse hasta el último segundo y ensayarse a conciencia con antelación.
Pero no todos los que participaron en la Ceremonia de Apertura de los Juegos Olímpicos de París 2024 sabían lo que iban a hacer, al menos no hasta justo antes de salir al escenario. Si no, pregúntenle a Rafael Nadal.
La leyenda del tenis español fue el primer portador de la antorcha olímpica en el tramo final, recibiéndola de manos del astro del fútbol francés Zinedine Zidane.
“Cinco minutos antes, diez minutos antes”, fue cuando le dijeron por primera vez exactamente lo que haría, según contó Nadal al extenista estadounidense Andy Roddick en su podcast “Served”.
“Era súper secreto. Cuando llegué, sinceramente, no sabía qué iba a pasar porque querían que fuera completamente secreto, como una sorpresa”, dijo Nadal. Cuando llegó el momento, mientras hablábamos, empezaron a explicarme: “Vas a estar ahí, vas a recoger la antorcha”.
“Cuando vi la imagen, subí las escaleras, fui al escenario a recoger la antorcha; en ese momento, llevaba como dos minutos esperando. Cuando me di cuenta, empecé a llorar un poco y, al hacerlo, dije: ‘Cállate, para, no es momento de llorar, es momento de disfrutar’. Intenta no emocionarte demasiado, simplemente disfruta el momento, salgamos, hagamos lo que nos propongamos y divirtámonos”.
Nadal, quien se retiró tras las finales de la Copa Davis en noviembre, ganó 14 de los 22 títulos de Grand Slam de su carrera en Roland-Garros, Roland-Garros.
Como dijo Roddick sobre la invitación de Nadal a participar en una ceremonia francesa y parisina: “Eso requiere décadas de respeto, tener tanta historia en esa ciudad hasta el punto de que dicen: ‘¿Sabes qué? Eres español, pero también eres uno de los nuestros, eres una de las figuras más importantes de la historia del deporte francés'”.
Y es un momento que Nadal jamás olvidará.
“Nunca podré agradecer lo suficiente a los organizadores, al pueblo francés y al equipo olímpico por, sin ser francés, brindarme ese momento”, dijo. “El momento en que recibí la antorcha de manos de Zidane frente a la Torre Eiffel ha sido uno de los momentos más emotivos de mi carrera tenística, sin duda.
“Los Juegos Olímpicos son algo extraordinario”. Porque no se trata solo de tenis, sino del evento deportivo más importante de nuestro mundo. Así que formar parte de él fue un reconocimiento muy significativo para mí.