**TARIFAS EN CRISIS: La Terquedad de Trump APLASTA la Economía de EE.UU. | Wall Street en PÁNICO**

En un giro alarmante de los acontecimientos, la economía estadounidense se encuentra al borde del colapso debido a las tarifas impuestas por la administración Trump. Mientras Wall Street se sumerge en el pánico, la advertencia del CEO de General Motors sobre el impacto devastador de estas tarifas en la industria automotriz resuena con fuerza. La estrategia de aumentar los aranceles para reducir el déficit presupuestario de 2.8 billones de dólares está resultando en un efecto contrario: un debilitamiento de la economía nacional.

China, la UE, Canadá y México han comenzado a implementar medidas de represalia que amenazan con desmantelar la red de producción global que Estados Unidos intentó controlar. Las importaciones chinas están siendo redirigidas a otros mercados, mientras que México está rompiendo récords de ganancias. La economía estadounidense, por su parte, se ve atrapada en un ciclo de incertidumbre y costos crecientes.

El informe de la Oficina de Presupuesto del Congreso es claro: las tarifas no solo reducirán el déficit, sino que también disminuirán el PIB en un 0.15% anual para 2035, lo que se traduce en 1.5 billones de dólares en producción perdida. Cada dólar recaudado en aranceles se convierte en una carga para las empresas y consumidores estadounidenses, quienes enfrentan precios más altos y márgenes de ganancia erosionados.

El impacto ya se siente en los bolsillos de los ciudadanos: un aire acondicionado que costaba 500 dólares ahora asciende a 560 dólares, un aumento del 12% debido a las tarifas. Las pequeñas empresas se ven obligadas a posponer inversiones y expandir sus operaciones, mientras que la inflación de bienes esenciales sigue en aumento.

Con el futuro de la economía estadounidense en juego, la pregunta es si estas políticas pueden sostenerse a largo plazo. La administración Trump defiende su enfoque, pero la realidad es que la economía se está contrayendo. Si no se implementan mecanismos de compensación, el ahorro del déficit podría convertirse en una carga que socave el crecimiento y la clase media. La situación es crítica, y la urgencia de una respuesta adecuada nunca ha sido tan evidente.