🛑 BRICS y México frenan a Trump en el G7

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**🛑 BRICS y México frenan a Trump en el G7: Un giro inesperado en la geopolítica global**

En un giro sorprendente que sacudió los cimientos del poder global, el bloque BRICS ha despojado a Estados Unidos de su protagonismo en la cumbre del G7, mientras México emerge como un jugador clave en esta nueva dinámica. La presidenta mexicana, Claudia Shainbaum, llegó a Alberta, Canadá, como invitada especial, justo cuando se anunciaba la incorporación de Vietnam al BRICS, un movimiento que dejó a Donald Trump en una posición defensiva.

Mientras los líderes del G7 debatían sobre crisis climática y comercio, el BRICS se expandía, enviando un mensaje contundente sobre la multipolaridad. Trump, en un intento desesperado por recuperar el control, propuso la reintegración de Rusia al G7, una idea que fue recibida con desdén por sus colegas, incluido el primer ministro canadiense, Mark Carney.

El ascenso de México como un socio estratégico fue evidente, ya que Shainbaum fue tratada con honores por el G7, lo que provocó la ira de Trump. En un discurso incendiario, acusó a México de traicionar a Estados Unidos y amenazó con aranceles del 100% a cualquier nación que apoyara al BRICS. Sin embargo, el mensaje de Shainbaum fue claro: “México no es el patio trasero de nadie”.

A medida que Trump intensificaba su retórica contra México, la presidenta reafirmó la soberanía de su país y la necesidad de construir alianzas que beneficien al pueblo mexicano. Con el respaldo de potencias como Rusia y China, México se posiciona como un jugador independiente, dispuesto a explorar nuevas oportunidades comerciales fuera del control estadounidense.

Este cambio de paradigma en la política internacional no solo redefine las relaciones entre México y Estados Unidos, sino que también plantea un desafío directo a la hegemonía estadounidense en América Latina. La cumbre del G7, que solía dictar el futuro del planeta, ahora se ve obligada a considerar la influencia creciente del BRICS y el papel crucial de México en este nuevo orden mundial. La pregunta es clara: ¿está Trump preparado para enfrentar la nueva realidad geopolítica?

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