**Diego Fernández: las incógnitas detrás del caso de joven desaparecido hace 40 años**
En un giro escalofriante, el caso de la desaparición de Diego Fernández Lima, un adolescente de 16 años que desapareció el 26 de julio de 1984 en Buenos Aires, ha resurgido con un hallazgo macabro que podría desvelar un oscuro misterio. Más de cuatro décadas después, los restos óseos del joven fueron encontrados en el jardín de una vivienda en Coglan, revelando preguntas inquietantes sobre su muerte.
El descubrimiento se produjo el 20 de mayo, cuando trabajadores de la construcción, al excavar para levantar un muro, se toparon con fragmentos óseos que, tras pruebas de ADN, fueron confirmados como los de Diego. Su familia, que había buscado incansablemente respuestas durante años, se enfrenta ahora a un nuevo capítulo de angustia y desasosiego. La madre de Diego, Irma Lima, de 87 años, y su hermano Javier, han pasado décadas sin saber qué ocurrió con él, y hoy, las esperanzas de justicia parecen renacer, aunque ensombrecidas por la tragedia.
Los forenses han determinado que Diego sufrió heridas mortales, incluyendo una puñalada en la espalda, lo que sugiere un posible homicidio. La fiscalía investiga las circunstancias de su muerte y el misterio de cómo sus restos llegaron a ese lugar. Cristian Graf, un excompañero de Diego, ha sido citado a declarar, ya que su familia vivía en la propiedad donde se hallaron los restos. Aunque su abogado asegura que Graf no tiene nada que ocultar, las autoridades están tras la pista de otros posibles involucrados.
La angustia se intensifica a medida que la familia busca respuestas. ¿Qué le sucedió a Diego aquella tarde fatídica? ¿Quién estuvo detrás de su desaparición y muerte? Las autoridades continúan la investigación, mientras la sombra de un crimen sin resolver persiste en la memoria de los argentinos. La búsqueda de justicia por Diego Fernández ha comenzado, y el eco de su historia resuena con más fuerza que nunca.