**TITULAR: CRISIS PRESUPUESTARIA: TRUMP EN PÁNICO MIENTRAS LOS INGRESOS POR ARANCELES NO LOGRAN TAPAR EL DÉFICIT**

En un giro alarmante para la economía estadounidense, un nuevo informe fiscal ha desatado el pánico en la Casa Blanca, revelando que los ingresos generados por los aranceles no son suficientes para cubrir el creciente déficit del país. La situación se vuelve insostenible a medida que los pagos de intereses sobre la deuda superan las expectativas, lo que pone en jaque la estabilidad financiera del gobierno.

A medida que los aranceles se acumulan en el presupuesto, el costo para los hogares estadounidenses se hace evidente, reflejándose en precios más altos para productos cotidianos. Este fenómeno, conocido como “impuesto oculto”, está erosionando el poder adquisitivo de las familias, que ya luchan con un aumento en el costo de vida. La administración Trump se enfrenta a una presión creciente mientras los legisladores buscan respuestas a una crisis que parece inminente.

El informe de la oficina fiscal independiente subraya que los déficits acumulados entre 2026 y 2035 han empeorado, con un aumento alarmante en los pagos de intereses. Aunque los aranceles prometen generar ingresos significativos, la cruda realidad es que no pueden igualar el peso de la deuda. Las empresas están sintiendo la presión: muchas se ven obligadas a ajustar sus márgenes, recortar presupuestos y, en última instancia, reducir la inversión y el empleo.

Con el futuro económico en juego, la pregunta persiste: ¿pueden los aranceles realmente cerrar la brecha del déficit? Las respuestas son complicadas y el tiempo se agota. Los líderes en Washington deben actuar rápidamente para reequilibrar el presupuesto, enfocándose en inversiones que fomenten el crecimiento y la eficiencia, en lugar de depender de un sistema de aranceles que solo exacerba la inflación y el riesgo fiscal.

La urgencia de la situación no puede ser subestimada. Los hogares estadounidenses están en la cuerda floja, enfrentando decisiones difíciles mientras la administración se esfuerza por encontrar una solución. La presión está sobre el gobierno para que actúe, o de lo contrario, los ciudadanos pagarán el precio de una crisis presupuestaria que amenaza con desbordarse.