**Puerto Inca se convierte en la nueva capital de la minería ilegal del oro en la selva peruana**
En un alarmante giro de los acontecimientos, Puerto Inca, en la provincia de Huánco, ha emergido como el nuevo epicentro de la minería ilegal de oro en la Amazonía peruana. Durante las últimas dos décadas, la minería ilegal ha arrasado la selva, pero la situación en Puerto Inca ha alcanzado niveles críticos, con un incremento del 100% en la deforestación en solo un año.
Las imágenes satelitales revelan una devastación sin precedentes: más de 1,050 hectáreas de bosque han sido destruidas en lo que va de 2025. La actividad minera está alterando el curso de ríos y transformando tierras agrícolas en zonas de explotación, dejando una huella visible desde el espacio. “La situación es insostenible”, advierte Sydney Novoa, especialista en temas ambientales.
La falta de control estatal ha permitido que mineros ilegales, muchos de ellos provenientes de Madre de Dios, se instalen en esta región, aprovechando la escasa fiscalización. El fiscal provincial Eduardo Nina Cruz denuncia que, a pesar de las inscripciones en el polémico registro REINFO, muchos operan en áreas prohibidas, incluyendo los cauces de ríos.
La comunidad local, preocupada por la contaminación del agua y el impacto en la salud pública, ha alzado la voz. “No tenemos agua y desagüe. Si seguimos así, nunca tendremos acceso a estos recursos”, lamenta el alcalde Carlos Antonio Navarro Cruzado.
Además, la minería ilegal en Puerto Inca no solo está vinculada a la devastación ambiental, sino también al narcotráfico. César Ypensa, abogado especializado en temas ambientales, destaca la presencia de extranjeros, especialmente de origen chino, que operan en estas actividades criminales. La convergencia de la minería ilegal y el narcotráfico ha creado un entorno peligroso y descontrolado.
La situación en Puerto Inca exige atención inmediata. La Amazonía peruana está en peligro, y la falta de acción efectiva del Estado podría llevar a consecuencias irreversibles. La comunidad y los expertos hacen un llamado urgente para detener esta crisis antes de que sea demasiado tarde.