**¡Impactante! Canadá Impone Tarifas del 25% a Acero Chino, Sorprendiendo a Pekín y al Mundo**
En un giro inesperado que sacudió los cimientos del comercio global, Canadá ha decidido cerrar sus puertas al acero chino, imponiendo una monumental tarifa del 25% sobre todas las importaciones de acero que contengan componentes de origen chino, sin importar el país de tránsito. Este movimiento, que entrará en vigor a finales de julio, ha dejado a Pekín y a los mercados internacionales atónitos.
Las nuevas regulaciones no solo apuntan a las importaciones directas, sino que abarcan también el acero procesado en terceros países como Vietnam y México, creando un filtro aduanero sin precedentes. La ministra de Finanzas, Chrystia Freeland, subrayó que esta medida es esencial para proteger a los trabajadores canadienses y avanzar hacia una industria más sostenible. “No podemos considerar una competencia justa cuando un producto tiene cinco etiquetas de diferentes países”, afirmó Freeland.
La reacción en Pekín ha sido inmediata, con medios estatales denunciando la decisión como una “politización del comercio”. Sin embargo, Canadá ya ha preparado su defensa ante la Organización Mundial del Comercio, argumentando que la medida es parte de un compromiso con la transparencia ambiental y la reducción de la huella de carbono.
Este movimiento no solo afecta a China, sino que también reconfigura las rutas comerciales en todo el mundo. Los puertos canadienses están ahora buscando espacio para el acero de Corea y Australia, mientras que las empresas estadounidenses temen que sus exportaciones sean golpeadas por tarifas adicionales si superan las cuotas impuestas por Ottawa. La tensión entre Canadá y sus socios comerciales se intensifica a medida que se cierran las puertas a las importaciones chinas.
El impacto de esta decisión resonará en los mercados de acero y más allá, con precios de futuros en Toronto ya en aumento. A medida que se despliegan los efectos de esta nueva política, el mundo observa con atención cómo se desarrollará esta batalla comercial y qué medidas tomará Pekín en respuesta. La próxima jugada en este ajedrez global podría ser crucial.