La última aparición pública de la reina Letizia ha desatado una ola de admiración y sorpresa en Francia, convirtiéndose en el tema del momento en los medios galos. Durante la tradicional recepción a las autoridades de Baleares en el Palacio de Maribent el pasado 4 de agosto, la reina capturó todas las miradas con un espectacular vestido blanco ibicenco que resaltaba su bronceado veraniego. Este atuendo, diseñado por el reconocido Tony Bonet, ha sido calificado por la prensa francesa como el “perfecto vestido de verano blanco bordado”, destacando su elegancia natural y su habilidad para encarnar el espíritu mediterráneo.
El impacto de la reina Letizia ha traspasado fronteras, y medios como Madame Lefigaro han elogiado su estilo, convirtiéndola en un ícono de la moda europea. La atención no solo se centra en su vestuario; la complicidad entre Letizia y sus hijas, la princesa Leonor y la infanta Sofía, ha sido otro de los puntos más comentados. Leonor, reciclando un vestido de su madre, y Sofía, luciendo un diseño juvenil de Zara, han añadido un toque familiar y moderno al evento.
El rey Felipe VI también ha sido objeto de elogios, optando por un look minimalista que contrasta con la rigidez habitual de los actos oficiales, mostrando una cercanía que ha resonado positivamente en la prensa francesa. Esta aparición no solo ha reafirmado el estatus de Letizia como un referente de estilo, sino que también ha fortalecido su proyección internacional, logrando captar la atención sin necesidad de discursos grandilocuentes.
La reina Letizia, con su elegancia y buen gusto, ha logrado conquistar a los admiradores más exigentes en Francia, un fenómeno que promete continuar generando titulares en los días venideros. ¡La realeza española brilla más que nunca en el escenario internacional!